Translate

sábado, 2 de mayo de 2015

CONQUISTA Y RECONQUISTA DE ALPUENTE (VALENCIA)*

“…cuando se entregó aquella fortaleza por los Moros que la ocupaban a los Cristianos, señoreándola el Señor rey D. Jaime;...
…por ser el primero que la entró, tomando posesión en su nombre, quedó el propuesto Vicente Javaloyas por castellano de los dos Castillos de la villa de Alpuente en nuestro Reino de Valencia, y sus términos, y juntamente le hizo merced del Palacio del Rey Moro, que tenía dicho Señor rey D. Jaime en aquel lugar, honrando vuestro linaje y Nobleza…”

Yo, el Rey (Felipe II).
(Real cédula o albala de 1 de Mayo de 1562).





En 1228 tuvo lugar una sublevación general de los musulmanes hispanos contra los almohades, que triunfó en Andalucía y en Murcia, propagándose enseguida a la Región valenciana.
El rey de Valencia Zeyt-Abuzeyt se resguardó tras las potentes murallas de la capital, pero no pudo resistir el asedio a que lo sometió el sublevado Zaiyán ben Mardanish, de Onda, que tomó Valencia el 24 de enero de 1229.
Abuzeyt huyó y se fue a Segorbe, porque en la cuenca del rio Palancia contaba con muchos súbditos fieles. Entonces el destronado rey mahometano buscó la protección de D. Jaime I, rey de Aragón, para poder volver a enfrentarse a sus enemigos.
Según Piles Ibars, el 20 de abril de 1229 se alió Abuzeyt con el rey de Aragón para expulsar al usurpador Zaiyán, prometiéndole la cuarta parte de las rentas de su perdido territorio y dándole en rehenes varios castillos, entre ellos el de Alpuente, que seguía en poder de partidarios suyos. Con ello, D. Jaime tenía título jurídico para intervenir en los asuntos internos territoriales valencianos.
Ese mismo año el rey de Aragón puso en marcha la cruzada para conquistar Mallorca, en la que participó el caballero francés Vicente de Valoyas, señor de Javaloyas (Albarracín) por herencia familiar, quien se integró en el cuerpo de ejército comandado por el conde de Rosellón, D. Nuño Sanz, tío y antiguo tutor de D. Jaime de Aragón, en el batallón cuyo jefe era el caballero occitano Oliver de Termes.
Tras la gloriosa reconquista de Mallorca el victorioso rey D. Jaime regresó a Barcelona en noviembre de 1230, donde fue recibido jubilosamente por todos, entre otros por el señor soberano de Albarracín don Pedro Fernández de Azagra.
Luís G. de Valdeavellano, historiador de Castilla y Aragón en el siglo XIII dice[1] que a principios de 1232 “mientras Jaime I se encontraba en Alcañiz, se presentaron ante el rey el magnate aragonés Blasco de Alagón y el Maestre del Hospital Hugo de Forcalquier y le pidieron que emprendiese una campaña contra la Taifa de Valencia, cuyo reyezuelo Zaiyán se había aprovechado del reciente viaje de don Jaime a Mallorca para hacer una audaz correría por tierras del bajo Ebro, donde había devastado los campos de Tortosa y Amposta. Aceptada por D. Jaime esta propuesta, el rey se dirigió a Teruel y desde allí a Gea, en el señorío de Albarracín, invitado a cazar el jabalí por el señor de este territorio, Pedro de Azagra…”.



El señor de Albarracín era muy amigo del tío del rey de Aragón, el conde D. Nuño Sanz, y ambos querían persuadir a D. Jaime de que emprendiese pronto la conquista del Reino de Valencia, para lo que organizaron esa cacería en tierras de Albarracín. Entonces, D. Pedro de Azagra puso a disposición del rey todos los hombres de armas y los medios disponibles que había en el señorío de Albarracín para la futura empresa reconquistadora de Valencia.
Además, como Valeriano Herrero Herreroha escrito[2],“en 1232 D. Jaime pasó por Teruel, donde Abuzeyt le entregó todos los derechos que se había reservado en Calatayud tres años antes, respecto a la ciudad de Valencia y esto en reconocimiento de los muchos servicios que le había prestado y le prestaba el (rey) de Aragón”, a quien le fue confirmada la donación de Alpuente en rehenes.
Por esa época, a Abuzeyt se le sublevaron varios pueblos, incluso Alpuente, por lo que, según dice Lázaro Ramiro[3]“en el archivo de la Villa consta que en mil doscientos treinta y dos, Almuganer, capitán suyo, haciendo una correría con setecientos hombres de Teruel se apoderó de esta Villa, y Castillo, habiéndose aprovechado del descuido de la guarnición, y moradores, que a la sazón estaban en el campo”. Esta fue la primera vez que los cristianos, ahora capitaneados por el musulmán Almuganer, conquistaron Alpuente a los moros partidarios del rey valenciano Zaiyán.
Posteriormente, en fecha desconocida, Abuzeyt se convirtió al cristianismo y fue bautizado con el nombre de Vicente. Entonces, como agradecimiento a la Iglesia, concedió al obispado de Segorbe la comarca del alto Mijares el 22 de abril de 1236.
Lázaro Ramiro asegura[4] que “en 28 de mayo de 1236 se ratificó en Teruel el referido Tratado de Calatayud, y fue otra vez dado en rehenes Alpuente al rey de Aragón, para que lo guarneciese de Nobles Infanzones, (pues) no era menester menos que la Nobleza para asegurar una Plaza tan importante.
Concluida esta confederación de allí a dos días (dice Diago) en el penúltimo de mayo, habiendo ido a Cedrillas, aldea de Teruel, otorgó el rey D. Jaime a ruegos de Zeyt-Abuceyt una liberal franqueza a los de Alpuente para todos sus Reynos y Señoríos en presencia de Don Pedro Fernández de Azagra, señor de Albarracín, (y otros)…
En el mismo año para la guarnición de cristianos que en ella (Alpuente) puso el rey don Jaime, se purificó y dedicó a Nuestra Señora de la Piedad una mezquita contigua al Castillo, que en la traslación de la iglesia a la que hoy existe quedó en ermita de Santa Agueda…”.


 Cerámica conmemorativa de la conquista de Alpuente (Valencia) en honor de su conquistador Vicente Javaloyas o de Valoys

Es decir, que en 1236 Alpuente fue guarnecida con nobles infanzones cristianos. La presencia del señor de Albarracín junto al rey D. Jaime en Cedrillas muestra el gran interés de Pedro de Azagra en la futura conquista del reino de Valencia, sobre todo por dominar la cuenca del río Guadalaviar, que es la ruta natural entre Albarracín y Valencia, donde Alpuente era una valiosa fortaleza estratégica. Por ello, en la nueva guarnición militar de Alpuente había algunos vasallos del señor de Albarracín, capitaneados por el noble caballero Vicente Valoyas, señor de Javaloyas -guerrero veterano de la conquista de Mallorca, en la que había participado ayudando al rey de Aragón-, quien había sido ya propuesto alcaide del castillo de Alpuente por D. Jaime[5].
Para tratar sobre todo de la conquista de la ciudad de Valencia, el Rey convocó Cortes generales en Monzón, que se reunieron el 15 de octubre de 1236, y en ellas se acordó realizar la cruzada contra el Reino de Valencia, prometiendo D. Jaime tierras a los que tomasen parte en esa guerra santa. A las Cortes asistieron prelados, nobles y representantes de Aragón y de Cataluña.
Al llegar la primavera de 1238, los diversos cuerpos del ejército cruzado llegaron a los alrededores de la ciudad de Valencia, tras rendir a su paso algunas poblaciones musulmanas. Las tropas de Teruel y los guerreros de Albarracín, todos ellos al mando del conde de Rosellón, D. Nuño Sanz, siguieron el camino del rio Palancia, por Segorbe, hasta llegar a Sagunto donde se unieron a las tropas reales de D. Jaime. La guarnición de Alpuente, como los hombres de armas de otros pueblos cristianos, se integraron en el ejército cruzado, pues todos los hombres disponibles acudieron a la convocatoria real, para apoderarse de la capital valenciana.Tras cinco meses de asedio, Valencia cayó en poder de los cristianos al anochecer del día 28 de septiembre de 1238. Esa misma noche entró en ella el victorioso D. Jaime.
El conquistador rey de Aragón quiso recompensar a su fiel caballero cruzado Vicente Javaloyas, alcaide de Alpuente; por lo que, mediante real merced[6] dada el 1 de noviembre de 1238, le concedió el palacio del rey moro de Alpuente, y la bodega de los Diezmos de la Villa, cuya hacienda mantendría como vínculo sucesivo de su Casa, así como muchas heredades y honores; entre éstos el de que en su escudo colocase junto a las cinco flores de lys y los jaqueles, armas de sus progenitores, el castillo formal de piedra en campo rojo sobre un puente de dos ojos, armas propias y antiguas de la villa de Alpuente.


Entretanto la desguarnecida fortaleza de Alpuente, como muchas otras poblaciones lejanas de Valencia, fue ocupada por musulmanes partidarios del derrotado rey Zaiyán.
Durante muchos meses el rey de Aragón, con sus principales cortesanos y con el señor de Albarracín, se dedicaron a hacer la repartición de la rica huerta valenciana a los guerreros conquistadores.
Finalizado el repartimiento, y con el fin de someter a los poblaciones que todavía ocupaban los moros, el Rey ordenó que dos cuerpos de ejército de tres mil hombres cada unoemprendieran la marcha. Uno de ellos se dirigió hacia la comarca de los Serranos por la cuenca del río Guadalaviar o Turia, para rendir Liria, Chelva y Alpuente. En este cuerpo de ejército se integraron los guerreros de Albarracín, y posiblemente fuese comandado por el propio D. Pedro de Azagra, señor de Albarracín, el mayor interesado en la reconquista de los pueblos del camino directo entre Valencia y Albarracín, pues D. Jaime le concedió al Azagra la población de Chelva, posiblemente por derecho de conquista.
Ubieto y Floriano afirman que Liria fue conquistada en 1240. También Chelva lo fue por entonces. Posiblemente D. Pedro de Azagra permaneciese en Chelva, o regresara a Liria o Valencia; porque la mayor parte de ese cuerpo de ejército prosiguió su avance por la Serranía, capitaneado por el caballero Vicente de Valoyas, señor de Javaloyas y alcaide de Alpuente.


Cuando los guerreros cristianos llegaron ante Alpuente la guarnición musulmana  se les enfrentó encarnizadamente. El asedio a Alpuente debió ser duradero. Por fin, el caballero Vicente Javaloyas, al mando de sus tropas, derrotó a los infieles sublevados “…por ser el primero que lo entró (en el castillo), tomando posesión en nombre del rey D. Jaime…”.  Entonces, en el verano de 1240, Alpuente fue ya reconquistado definitivamente, fecha que ha confirmado Valeriano Herrero Herrero cuando dice[7]que “el propio Sr. Ramiro (Lázaro) habla de un decreto en 1240 por el que D. Jaime declaraba sujetas a Alpuente las aldeas de La Yesa, Aras y Titaguas”.


                                                           JOAQUÍN  JAVALOYS.



* La información de este artículo está parcialmente entresacada del libro LOS VALOIS DE ESPAÑA, del que es autor Joaquín Javaloys García, en la edición digital corregida y actualizada del mismo, de julio de 2016. Para ver el texto de esta edición digital hay que ir a la siguiente dirección :

https://www.blogger.com/blogger.g?blogID=9113842718057588051#editor/target=post;postID=5896500599263959520;onPublishedMenu=allposts;onClosedMenu=allposts;postNum=11;src=postname
 
 
[1] “Historia de España antigua y medieval”. Tomo III: Castilla y Aragón en el siglo XIII. Alianza Editorial. Madrid. 1988. Página 92.
[2] “La Villa de Alpuente. Aportación al conocimiento de un pueblo con historia”. Valeriano Herrero Herrero. 2ª edición. Segorbe. 1993. Páginas 62 y 63.
[3]“Historia de la Virgen de la Consolación”. Pamplona. 1785. Página 46.
[4] Obra citada. Páginas 46 y 47.
[5] Certificación de 9 de enero de 1703 emitida por D. Juan Alfonso de Guerra, cronista y rey de Armas del rey Felipe V de España, sobre la historia de la familia apellidada Javaloyas, Valoyas o Valois. Biblioteca Nacional. Madrid. Manuscrito número 11.393. Folio 2.
[6] Certificación ya citada, de 9 de enero de 1703. Folio 2.
[7] Obra citada. Página 70

No hay comentarios:

Publicar un comentario