Reconoce que la recuperación española ha sido "impresionante", pero cree que hay que seguir con las reformas y anima a estudiar la posibilidad de impulsar el contrato único y la 'mochila austriaca' para reducir la dualidad del mercado laboral.
Ya lo dijo a mediados de diciembre y ha vuelto a insistir este mes de enero: El Fondo Monetario Internacional (FMI) cree que España tiene que dar prioridad a las medidas de ingresos para reducir el déficit. Y en particular, a las menos distorsionantes, como el IVA o los impuestos medioambientales. Así lo señala en su informe anual sobre España, donde reconoce que España puede cumplir el objetivo de 2017 (3,1%) sin tomar nuevas medidas, pero cree que debería recurrir a los ingresos para seguir corrigiendo el desfase a medio plazo.
Y es que, tal y como sostiene el organismo, la recaudación del IVA en España es inferior a la media de la UE y la razón principal es que solo 60% de los bienes y servicios que grava el impuesto tributan por el tipo general (21%). En países como Francia o Alemania este porcentaje llega al 70% y el 80%. Recortar esta brecha aumentando gradualmente los tipos o pasando unos productos de un tipo a otro podría mejorar los ingresos del impuesto en unos 2.000 millones, lo que reduciría notablemente el ajuste fiscal pendiente.
En paralelo, se podrían conseguir más ingresos a través de la limitación del gran número de deducciones y exenciones del sistema tributario. Es cierto que estos beneficios fiscales se han reducido en los últimos años, pero el FMI cree que el sistema español sigue sigue teniendo demasiados. La lucha contra el fraude es otra de las vías para seguir mejorando los ingresos del sistema.
Y se podrían subir de nuevo los Impuestos Especiales y las tasas medioambientales. A pesar de los aumentos en los últimos años, estas figuras siguen siendo bajas en España, en comparación con la media de la UE, sobre todo en lo que afecta a la energía. La armonización y el mejoramiento del desempeño de los impuestos ambientales podría elevar los ingresos en medio punto de PIB.
Pide también una revisión exhaustiva del gasto en Sanidad y Educación, retocar los copagos y controlar las prestaciones por desempleo
Según el Fondo, los ingresos deben ser la principal vía para reducir el déficit, aunque también existe cierto margen a través de la racionalización del gasto. No pide nuevos recortes, pero sí un examen exhaustivo de algunas partidas como la Sanidad y la Educación para mejorar la calidad y la eficiencia del gasto público. Y retoma el tema del copago de medicamentos.
A su parecer, el uso de medidas como los copagos en el sistema de salud, con exenciones o compensaciones para los más vulnerables, también suele ayudar a reducir el déficit. Lo mismo ocurre con una mejor "focalización" de los subsidios de contratación, que deben tener mayor control y estar más vinculados a la búsqueda activa de empleo, así como con la racionalización de varios incentivos a la contratación.
Una recuperación impresionante
A pesar de todo, el FMI reconoce que la recuperación de la economía española ha sido "impresionante", con una fuerte creación de empleo y una gran reducción de desequilibrios. A su juicio, las reformas han conseguido el efecto buscado, pero deben mantenerse y profundizarse porque los ajustes "son incompletos" y aún persisten debilidades estructurales, como el paro, la deuda y el débil crecimiento de la productividad.
En este sentido, cree que el Gobierno debería trabajar en las materias en la que existe un amplio apoyo político, como la mejora de las políticas activas de empleo, la reforma de las finanzas públicas regionales para salvaguardar las finanzas públicas generales y el fortalecimiento de las políticas de innovación y educación para aumentar la productividad de la economía.
Además, anima a las autoridades a tomar medidas que permitan a las pequeñas y medianas empresas mejorar su productividad, una aplicación más rápida de la Ley de Unidad de Mercado, avances en la liberalización de los servicios profesionales, aumentos en la inversión en I + D, mejoras en el acceso a la financiación no bancaria para la innovación fronteriza y la revisión de las regulaciones contingentes.
Cree que el contrato único y la 'mochila austriaca' son buenas opciones para reducir la dualidad del mercado laboral
En materia laboral, el FMI reconoce que la reforma laboral de 2012 ha contribuido a mejorar el funcionamiento del mercado de trabajo en España, pero considera que aún persisten "importantes rigideces" y apuesta por seguir trabajando para reducirlas. En concreto, por ejemplo, propone hacer más atractiva la contratación indefinida reduciendo el actual menú de contratos.
De hecho, va un poco más allá y reconoce que el contrato único de duración indefinida y con una indemnización que vaya aumentando de forma progresiva con el tiempo, podría ser una opción para reducir la dualidad. Además, podría coexistir con otro tipo de contratos que tengan en cuenta el empleo en sectores con altos niveles estacionales.
También recoge la posibilidad de introducir de forma gradual la 'mochila autriaca' para que los derechos a las indemnizaciones por cese en un puesto de trabajo pueden transferirse de un empleo a otro, de forma que pagos por indemnizaciones aumenten con la duración independientemente del tipo de contrato. Mientras tanto, deben abordarse las persistentes incertidumbres jurídicas y administrativas que obstaculizan la eficacia de las reformas del mercado de trabajo y afectan al empleo indefinido.
TERESA LÁZARO Vía EL CONFIDENCIAL