Translate

viernes, 21 de julio de 2017

PROFESIONALES CON MENTALIDAD DE START-UP

Esto es lo que buscan y necesitan las empresas para mejorar internamente.
Uno de los mayores lastres de las empresas medianas y grandes, es el corporativismo. El que sus profesionales busquen un acomodo en la estructura de la empresa para tener un buen puesto, con una buena remuneración, y después dedicarse con uñas y dientes a defenderlo tanto tiempo como posible.
Se da en todos los estamentos de las empresas, pero muy en especial en los puestos directivos. Y es muy lógico, pues cuanto más alto está una persona, desde más arriba se puede caer.
Por eso las empresas para sobrevivir a los cambios que se avecinan, buscan tener entre sus trabajadores a personas con actitudes de emprendimiento que sean capaces de generar cambios disruptivos en los procesos y los negocios de las mismas.
Así lo pone de manifiesto el estudio Emprendimiento corporativo en España realizado por la Universidad de Deusto junto con otras Universidades como la Autónoma de Madrid.


Estas ideas están presentes sobre todo en las grandes organizaciones, porque debido a su tamaño son las más reacias a los cambios. Los cambios en las organizaciones son siempre promovidos por las máximas estructuras que sienten la necesidad de adaptarse, y deben de convencer a las estructuras intermedias y altas para que modifiquen sus pautas de conducta.
Si vemos los periódicos observamos como los máximos dirigentes de empresas del tipo BBVA, Santander, Movistar, Enagas,  etc…  aparecen en los medios lanzando mensajes “evangelizadores” sobre los cambios a introducir en sus organizaciones. Pero claro, una cosa es decirlo y otra muy diferente es conseguirlo.
Evidentemente, cada empresa tiene su propio camino, pero parece que se está poniendo de moda la figura del Chief Entrepreneur Executive ( la manía de poner nombres ingleses a lo que se puede denominar fácilmente en castellano ) como dinamizador interno de todo el proceso de cambio.
Esta persona que a veces es un experto externo se coloca al máximo nivel organizativo ( acceso directo a la Presidencia ) para que tenga el poder de llevar a cabo las acciones necesarias. Y se hace depender de él todo el proceso de cambio.
En este cambio es fundamental la actitud de la Start-up, es decir de la empresa pequeña y nueva que se adapta al mercado y se orienta totalmente a los que los Clientes desean de ella. Es flexible y reacciona con rapidez a las necesidades cambiantes del entorno.
Esto es lo que buscan y necesitan las grandes empresas para cambiar. Personas que lleven estos genes y promuevan los cambios necesarios en su entorno. Esto es lo que valoran las empresas, sean grandes o pequeñas.
Pero incluso con este tipo de personas dentro de la organización es difícil de conseguir resultados, para ello hay entre otras cosas que :
-       Implicación de la Alta Dirección en el Proyecto
-       Predicar el Cambio y los Objetivos a todos los niveles
-       Facilitar que participe el máximo de personas
-       Preparar y formar a las personas que lo requieran
-       Diseñar Acciones acordes con la Organización huyendo de aplicaciones externas estándar
-       Ser conscientes de que es una carrera de largo plazo
Las ventajas de tener éxito o no también se perciben en el largo plazo, pero hoy las situaciones cambian tanto y con tanta rapidez, que el no hacerlo supone casi un suicidio.
Como muy bien dijo el amigo Charles Darwin hace ya mucho tiempo, solo los que se adaptan a los cambios sobreviven.
Así ha sido, y así va a seguir siendo.
Lo que sucede ahora es que los cambios se producen con una rapidez pasmosa, de ahí la importancia de la mentalidad de Start-up. La empresa que no la tenga, lo pasará mal.



                                                  AMADOR PALACIOS 
                                                  Publicado en su blog Desde la terraza de Amador 

No hay comentarios:

Publicar un comentario