La soledad se está convirtiendo en una plaga en Reino Unido: el 75% de los ancianos del país viven solos
y 200.000 de ellos pueden pasar un mes sin mantener ninguna
conversación con un amigo o familiar y sin ningún tipo de interacción
social.
Ante esta realidad, la primera ministra, Theresa May, ha puesto en marcha un “Ministerio de la Soledad” o Secretaría de Estado que pueda paliar los efectos de un aislamiento que, en cifras globales, afecta a más de nueve millones de personas. También se calcula que más de uno de cada diez británicos están solos pero no lo admiten.
Visto
el problemático escenario que la soledad dibuja en Reino Unido y
teniendo en cuenta que el envejecimiento de los españoles va en aumento y
en menos de 15 años uno de cada cuatro habitantes tendrá más de 65, cabe hacer la siguiente pregunta: ¿España debería plantearse crear un ministerio de soledad?
En España de momento no es urgente…
“El problema de la soledad es un problema importante. En España quizás no alcanza los datos de Reino Unido, pero es un problema que puede ir creciendo con el tiempo.
El 60% de las personas mayores de 65 años que atendemos viven solas,
muchas de ellas viven en sentimiento de soledad”, ha advertido el
responsable del Programa de Mayores de Cruz Roja Española, Joaquín Pérez.
Una
primera cuestión a considerar es que en España no hay tantos ancianos
como en Reino Unido y, aunque con evidentes deficiencias, la atención
social que se presta no hace imprescindible de momento recurrir de forma
urgente a la creación de ese ministerio. Sin embargo, como señala
Pérez, el problema irá a más, y en una década es más que probable que necesite crear ese ministerio.
Hay tres razones que lo justificarían: los estragos de la Guerra Civil española sobre la población joven; una generación del ‘baby boom’ todavía sin jubilarse; y, sobre todo, los efectos del divorcio.
En cualquier caso, Cruz Roja Española, Médicos del Mundo, Desarrollo y Asistencia y el Teléfono de la Esperanza, ponen el acento en que la soledad es un problema “cada vez más frecuente”, que puede “ir creciendo con el tiempo”, y han pedido introducir mejoras para reducir su incidencia.
“No pensamos que sea tan acuciante como en el Reino Unido, pero eso no quiere decir que no sea problema.
Creemos que hay que estar atentos, hay que estar presentes e iniciar
acciones de carácter muy preventivo para que la incidencia sea menor”,
ha subrayado Pérez.
También ha añadido
que, aunque la soledad en España “todavía no tiene las características
de otros países”, “poco a poco se va incorporando. […] Hay que
consolidar el sistema público de dependencia e introducir mejoras para
que el sistema vaya más rápido”.
Para
el presidente de Médicos del Mundo, José Félix Hoyo, es “necesario”
tener un “plan cerrado” que incluya la “mejora de la vida” de las
personas que viven en soledad. “Hay muchos sistemas para conseguir ese
apoyo, como grupos de ayuda. Hay personas que tienen necesidades
especiales, personas dependientes de todo tipo y que tienen poco apoyo
social”, ha concretado.
Por su parte, el presidente del Teléfono de la Esperanza de Aragón, Alberto Hernández, ha insistido en que la soledad “es un problema cada vez más frecuente” en la sociedad española. “Cada vez más personas mayores y dependientes viven solas”.
También critica el hecho de que, aunque la Ley de Dependencia “haya podido mejorar la cobertura, no ha supuesto una mejora sustancial“.
“Se requieren más y mejores servicios para cubrir el objetivo de
conseguir el bienestar integral de la persona que se encuentra en esta
situación”, ha concretado.
…pero lo será en una década
En
cualquier caso, todos estos argumentos llevan a la conclusión de que,
por el momento, quizás no sea imprescindible crear urgentemente un
ministerio de la soledad, pero con la actual tendencia va a ser necesario crearlo dentro de una década.
Hay
tres razones fundamentales que explican las diferencias actuales con
Reino Unido y por qué en tan solo unos años las Administraciones tendrán
que poner el problema encima de la mesa, no solo por el incremento de
gente que vivirá sola sino también por la crisis que se avecina en el
sistema público de pensiones.
1. La primera de ellas tiene que ver con la pérdida de población joven a consecuencia de la Guerra Civil española, que acabó con la vida de una gran cantidad de gente joven,
además de todos aquellos que se exiliaron. Esto ha repercutido en el
número de jubilados de los últimos 20 años, significativamente menor que
el que le hubiera correspondido sin esa guerra.
Así,
aunque se insiste en la problemática del envejecimiento de la
población, que es real, también es cierto que ese problema sería mucho
mayor de no haber existido la confrontación.
La generación del ‘baby boom’ española se estará jubilando en la próxima década
2. Otra cuestión a considerar es que, en el caso de los británicos, como en toda Europa y Estados Unidos, la generación del baby boom, que se produjo inmediatamente después de la II Guerra Mundial, a finales de 1945 e inicio de los cincuenta, ya vive jubilada.
Sin embargo, el baby boom español es inmediatamente después del Plan de Estabilización (1959), o sea a partir de esta fecha y en los sesenta. Y este colectivo empezará a jubilarse a partir de la próxima década. Esto conllevará que, de golpe y de forma desproporcionada, se jubile una gran cantidad de gente.
Como
advierte el profesor de investigación del CSIC Antonio Abellán, si hay
un momento en el que el sistema público de pensiones tendrá que
demostrar su resistencia es cuando comiencen a acceder los nacidos en
los años de mayor explosión de la natalidad en España, la generación del
baby boom. Para entonces el sistema deberá estar preparado para soportar ese aumento de perceptores.
La generación del baby boom
(nacidos entre 1958 y 1977) comenzará a jubilarse en la próxima década,
pero lo hará en una transición suave que tendrá su pico en 2042 con la incorporación de unos 723.000 potenciales pensionistas,
lo que elevará el total a 15 millones, frente a los 8,7 millones
actuales, insistía Abellán en una información publicada el pasado 14 de
enero en el diario ABC.
Son muchos los divorciados que, uno u otro, acaba viviendo solos en la vejez
3.
Pero, el hecho que marca una gran diferencia y que por ahora no afecta a
los ancianos en España, aunque sí lo hará en las próximas décadas, es la incidencia del divorcio.
La
soledad afecta ahora sobre todo a pensionistas viudos y en mayor medida
a viudas, pero en un futuro próximo a estos se les sumará una gran
cantidad de divorciados y divorciadas.
Hay
que considerar que, tanto en Reino Unido como en otros países
anglosajones, la legalización del divorcio llegó mucho antes que en
España, con lo que su actual estadística de soledad, es decir del
creciente número de personas divorciadas que llegan a la vejez en esa
situación, tiene que ver con ello.
En
el caso de España, la gran mayoría de las personas jubiladas que viven
solas no son divorciadas, sino viudos y viudas, bien porque no había
divorcio o porque su incidencia era escasa.
En
ese escenario, el problema de la persona divorciada que vive sola es
que genera un coste muy elevado, mientras que cuando son dos los que
conviven, a una edad avanzada pueden ayudarse el uno al otro y la
repercusión es menor.
Pero, como en los últimos diez años la tasa de divorcios en España se ha situado en cifras record por encima del resto de países avanzados en Europa, la consecuencia lógica es que en un futuro próximo habrá muchas más personas viviendo en soledad.
FERRAN ESTEVE Vía FORUM LIBERTAS
Yo trabajo de taxista.Conversar con los clientes ya no es como antes,ahora con la mierda de los moviles a menudo se sientan detras y te dejan la cabeza como un bombo.Aun asi,la gente mayor agradece un poco de conversacion.Una simple charla intrascencente les sienta muy bien.En el lado opuesto estan las niñatas,no se les puede ni mirar ni hablar.Estas estupidas le han metido tal cantidad de mierda en la cabeza(de niñas son encantadoras) que cualquier cosa es malinterpretada y luego va el padre o el novio a pedirte explicaciones.Lo cierto es que de universitario,de joven parece que te vas a comer el mundo y luego,ya viejo,ves que eres otro idiota del mundo y la vida pasa por encima tuya como una apisonadora.
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