"Esto lo tienen que cortar, si no nos van a matar. Los migrantes vienen más agresivos"

"¿Cómo nos vamos a defender si nos echan cal viva, heces y sangre y no podemos utilizar ni porras, ni pelotas de gamas ni protección antidisturbios?", pregunta la Guardia Civil de Ceuta

Uno de los agentes heridos con cal viva en la valla de Ceuta. (EC)

El miedo de la Guardia Civil de Ceuta es doble. A sus mandos: prohibido hablar con los medios, bajo amenaza de sanción o expediente disciplinario. También de los migrantes que aspiran a entrar en la ciudad autónoma. Este miércoles fue un día muy duro para los agentes que custodiaban la valla que separa Marruecos de España. Intentaron el salto más de 300 personas. Lo hicieron 115. Siete heridos. Cal viva, heces, sangre…

“Esto lo tienen que cortar, pero ya. Si no, nos van a matar. Los migrantes vienen muy agresivos, cada vez más”. Quien habla es un experimentado guardia civil destinado en Ceuta, harto de la desproporción de efectivos: solo 10 agentes. “¿Cómo nos vamos a defender si nos echan cal viva, heces y sangre y no podemos utilizar ni porras, ni pelotas de goma ni protección antidisturbios?", pregunta un guardia civil de Ceuta.

200 inmigrantes saltan la valla de Ceuta y dejan varios agentes heridos por cal viva

Agencias

Una vez en Ceuta, los subsaharianos han continuado, a la carrera, su camino hacia el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), que todavía sigue colapsado y con tiendas de campaña

Los ‘palos’ de los migrantes también se recibieron del lado marroquí. “A dos policías de Marruecos les han abierto la cabeza. Ellos han salido peor parados que nosotros. La frontera es muy grande y estamos totalmente ‘vendidos’. Eso es un desastre. No hemos notado ninguna diferencia en el Gobierno de Sánchez respecto al de Rajoy. Estamos igual que antes”.

Fuentes oficiales de la Guardia Civil explican a El Confidencial que los efectivos en la valla aumentan por la noche y que el salto del miércoles, localizado en la zona entre la ITV y la finca Berrocal de Ceuta, fue el mismo del pasado mes de julio. “Todos los heridos están ya en su casa”, dijeron estas mismas fuentes.

"Me la estoy jugando"

“Nos han pillado con la guardia baja, aprovechando un día de fiesta en Ceuta. Esto se trata de aguantar el chaparrón y que no te toque. Se seguirá repitiendo lo que ha ocurrido porque no tenemos cómo defendernos”, subscribe otro miembro del Instituto Armado en declaraciones a este periódico. “Por favor, ni se te ocurra decir mi nombre. Me la estoy jugando”.

La ONG ‘Caminando Fronteras’ pide al Gobierno que rechace “las devoluciones en caliente”, como prometió el Gobierno de Sánchez. “Hay que velar por los derechos de esas personas”, indicó un portavoz de la organización. “Lamentamos el uso de la cal viva, pero también las heridas de los migrantes producidas por las concertinas, que el Ministerio del Interior se ha comprometido a suprimirlas”.

Se les ve paseando por la playa de Benítez de Ceuta. Van escuchando música con los auriculares e intentando localizar una Wifi abierta

Los migrantes que saltaron la valla se desplazaron al CETI (Centro Temporal de Inmigrantes) de Ceuta, que se encuentra ya desbordado. La saturación es extrema: con capacidad para 500 plazas acoge ahora a 1.300 personas. Se les ve paseando por la denominada playa de Benítez de Ceuta, su salida natural, a su aire, escuchando música con los auriculares e intentando con sus teléfonos móviles localizar una red Wifi en abierto.

Desconcierto

“No hay conflictividad social con los vecinos de la zona, al menos no es mayor ahora que en otros tiempos”, confirman fuentes del Gobierno autonómico, que recuerdan que en la crisis del 26 de julio ya cedieron el centro ecuestre de la ciudad para que el Ejército pudiera proporcionar tiendas de campaña.

Estas mismas fuentes se extrañan de la violencia de los migrantes. “Se les tiene como muy pacíficos y hasta ahora siempre han sido muy colaboradores, tantos ellos con los ceutíes como viceversa. Más problemas generan los Mena [Menores extranjeros no acompañados] que no están bajo el paraguas de las ciudad autónoma”.


                                                                                 AGUSTÍN RIVERA   Vía EL CONFIDENCIAL